Se estrena el documental Fillas de Galicia que retrata los años más duros de la emigración de una gallega en Cuba
En el marco del Festival Internacional de Cine Independiente de Ourense se estrena en Galicia -como primera proyección en Europa- el documental Fillas de Galicia dirigido por Natasha Vázquez y Ernesto Daranas, y financiado por la Xunta de Galicia a través de la Secretaría Xeral de Emigración.
Una película en la que se retratan los años más duros de la emigración de la mujer gallega y su lucha por ganar un espacio social relevante a través de los ojos de Adela Feijoo y María de Jesús Vilanova, dos ourensanas de 103 y 44 años afincadas en Cuba. La película documental, proyectada en la sección Panorama Galicia, aborda también de qué forma, en una sociedad habanera especialmente dura con las mujeres emigrantes, nacen movimientos cívicos adelantados a su tiempo como la sociedad Fillas de Galicia que en 1960 llegó a agrupar a 58.000 mujeres gallegas y sus descendientes. Gallegas como Adela Feijoo, firme activista de Fillas de Galicia y un testimonio vivo de cómo la mujer galega en La Habana consiguió crear su propio espacio y luchar por sus intereses estructurando una estrategia social de modernidad sorprendente. Fillas de Galicia se erigió, así, en mucho más que un sanatorio y un centro de reubicación social para gallegas: una corriente de acción y pensamiento.
Adela Feijóo nació en la aldea de Mugares, en el concello de Toén, en 1902, y vivió los años de mayor auge migratorio entre Galicia y Cuba. Viuda a los 33 años, con un hijo y bajo una Habana que atravesaba en la década de los 30 una crisis económica y social, sacó adelante su negocio y comenzó a participar en las actividades de las diferentes irmandades gallegas. La vida de María de Jesús Vilanova está marcada por el descubrimiento, cuando llegó a edad adulta, de que su origen era gallego. Al conocer su procedencia ingresó en la Casa de Galicia de Santiago de Cuba y desde entonces destaca por su papel activo que ejerce desde la organización de la que es vicepresidenta. El regreso a Ourense de Adela Feijoo y María de Jesús Vilanova, tras más de medio siglo de ausencia en el caso de la primera, sirve como punto de partida a un documental que cuenta también con la colaboración de importantes especialistas gallegos en la cuestión migratoria.
Fillas de Galicia forma parte de una trilogía sobre la emigración gallega a Cuba que comenzó con el documental Los últimos gaiteros de la Habana, que consiguió más de 15 premios internacionales, estando en fase de producción la tercera obra: Oficios de gallegos. Hasta el momento Fillas de Galicia obtuvo galardones como el Gran Premio Vitral en Encuentro Nacional de Vídeo 2005 (Cuba), Premio de Prensa Cinematográfica a la Mejor Obra en el Concurso Nacional de Cine, Radio y Televisión 2005 (Cuba), Mejor Documental, Mejor Fotografía y Mejor Edición en el Encuentro Nacional de vídeo 2005 (Cuba).
Una película en la que se retratan los años más duros de la emigración de la mujer gallega y su lucha por ganar un espacio social relevante a través de los ojos de Adela Feijoo y María de Jesús Vilanova, dos ourensanas de 103 y 44 años afincadas en Cuba. La película documental, proyectada en la sección Panorama Galicia, aborda también de qué forma, en una sociedad habanera especialmente dura con las mujeres emigrantes, nacen movimientos cívicos adelantados a su tiempo como la sociedad Fillas de Galicia que en 1960 llegó a agrupar a 58.000 mujeres gallegas y sus descendientes. Gallegas como Adela Feijoo, firme activista de Fillas de Galicia y un testimonio vivo de cómo la mujer galega en La Habana consiguió crear su propio espacio y luchar por sus intereses estructurando una estrategia social de modernidad sorprendente. Fillas de Galicia se erigió, así, en mucho más que un sanatorio y un centro de reubicación social para gallegas: una corriente de acción y pensamiento.
Adela Feijóo nació en la aldea de Mugares, en el concello de Toén, en 1902, y vivió los años de mayor auge migratorio entre Galicia y Cuba. Viuda a los 33 años, con un hijo y bajo una Habana que atravesaba en la década de los 30 una crisis económica y social, sacó adelante su negocio y comenzó a participar en las actividades de las diferentes irmandades gallegas. La vida de María de Jesús Vilanova está marcada por el descubrimiento, cuando llegó a edad adulta, de que su origen era gallego. Al conocer su procedencia ingresó en la Casa de Galicia de Santiago de Cuba y desde entonces destaca por su papel activo que ejerce desde la organización de la que es vicepresidenta. El regreso a Ourense de Adela Feijoo y María de Jesús Vilanova, tras más de medio siglo de ausencia en el caso de la primera, sirve como punto de partida a un documental que cuenta también con la colaboración de importantes especialistas gallegos en la cuestión migratoria.
Fillas de Galicia forma parte de una trilogía sobre la emigración gallega a Cuba que comenzó con el documental Los últimos gaiteros de la Habana, que consiguió más de 15 premios internacionales, estando en fase de producción la tercera obra: Oficios de gallegos. Hasta el momento Fillas de Galicia obtuvo galardones como el Gran Premio Vitral en Encuentro Nacional de Vídeo 2005 (Cuba), Premio de Prensa Cinematográfica a la Mejor Obra en el Concurso Nacional de Cine, Radio y Televisión 2005 (Cuba), Mejor Documental, Mejor Fotografía y Mejor Edición en el Encuentro Nacional de vídeo 2005 (Cuba).
R.